Reflexiones

Reflexión Pastoral 14 de Junio

LA TRANSICIÓN DE LA ALABANZA A LA ADORACIÓN. 

LA VERDADERA ADORACIÓN RECIBE Y ENVÍA SONIDOS CELESTIALES Mientras los sonidos del cielo desatan actividad angelical divina, los sonidos satánicos desatan actividad demoniaca.

En la generación presente, Satanás a apoyado intencionalmente a músicos y cantantes capaces de desatar sonidos de muerte.

Para propagar su mensaje de pecado y muerte, usa varias palabras, música, y ritmos, y desata tenebrosos sonidos sobre la tierra, con el fin de causar confusión, rebelión y destrucción.

Por eso, debemos supervisar lo que nuestros hijos oyen, y protegerlos ente cualquier ataque demoniaco que pueda ser desatado sobre ellos a través de los sonidos que reciben.

Una característica obvia del sonido satánico en la generación de hoy es la violencia, junto al abuso de alcohol y drogas, alienación, salvajismo y suicidio.

Las filosofías demoniacas están desplegándose veloz y libremente a través de todos los medios de comunicación (televisión, radio, películas, revistas, redes sociales e internet) esta es una generación violenta debido a los sonidos los que está expuesta.

No podemos permanecer ignorantes a esos principios, porque el enemigo los está usando para traer destrucción y para robarle a esta generación su propósito.

cada vez que un sonido nuevo se desborda en la iglesia, la atmósfera cambia y las viejas estructuras son rotas. A través de la adoración podemos romper fortalezas mentales.

¡La voz humana ungida es poderosa! Cuando emitimos en el Espíritu, sonidos inspirados por el cielo, con la autoridad que Jesús nos delegó, Lucas 10: 17-19.

Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre. Y les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará. Mateo 28: 18. Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.

Los ángeles de Dios responden y empiezan a operar, porque obedecen sus instrucciones. Como hijos de Dios, podemos producir sonidos que desaten amor por Dios, salvación, avivamiento, liberación, paz, restauración. Unidad, salud, prosperidad, propósito, productividad, y vida en le tierra.

El único Dios verdadero ha entregado al ministerio de adoración el desatar sonidos del cielo para la presente generación. Adorar no es solamente cantar o sentirse bien respecto a una melodía agradable. Ésta es una guerra de adoradores.

Si nos conformamos sólo con cantar lindas canciones y dulces melodías, no cumpliremos el propósito principal de nuestro ministerio como adoradores. Cuando entendamos estos principios, nuestra adoración cambiara para siempre.

Necesitamos saber cómo identificar los sonidos que Dios está desatando hoy, para estar en armonía con la adoración del cielo.

Así es como daremos a luz su voluntad para nuestras vidas, familias, iglesias, ciudades, naciones y continentes en esta generación.

LA VERDADERA ADORACIÓN EXALTA EL NOMBRE DE JESÚS Y LA PALABRA DE DIOS. Hoy, muchas canciones de “adoración” usadas en las iglesias, o que suenan en las estaciones de radio cristianas, carecen de poder porque no están basadas en la Palabra de Dios. Porque las canciones ministran sólo a la carne. Debemos escribir canciones espirituales.

Canciones que derramen constante adoración y conocimiento revelado. continuará la próxima semana

Pastora María de Machuca